El olor a corrupción en la Eby amerita la rendición de cuentas



Gracias a la ayuda de los funcionarios de la Entidad Binacional van saltando, cada vez más, mayores datos sobre la desprolija e irresponsable administración de Nicanor Duarte Frutos al frente de Yacyretá. Se espera que la Contraloría General de la República haga un buen cruce de su declaración jurada y que los órganos constitucionales respectivos sean severos en la investigación sobre su opaca gestión.

El verborrágico personaje hizo lo que quiso en la EBY, todo ante el escaso control y liderazgo del titular del Poder Ejecutivo. El que se vendió como amigo de «la izquierda argentina», Gobierno de Fernández/Kirchner, para estar en Yacyretá, y que lo compró Abdo Benitez, es responsable del maltrato actual de la Argentina al Paraguay.

Durante este tiempo de su presencia en la EBY, Duarte Frutos jamás insinuó siquiera en molestar a la chapa Fernández/Kirchner para renegociar el Anexo C, que caducó hace años. Otro ejemplo del daño que hizo al país es que por su ineptitud, la Argentina ya solo transfiera US$ 10.000.000 por mes, en comparación con los US$ 18 a 20 millones que depositaba anteriormente.

Metió en la EBY a sus amigos, lacayos y compadres y hasta mantuvo a planilleros. Éste último caso está representado en el inefable Raúl Silva, involucrado en la sospechosa compra de insumos chinos, y los tapabocas de oro, durante la pandemia.

En nuestra página se muestra la rendición del salario en concepto de bonificación de Silva, que prueba el millonario pago por tareas que no cumple, según declaraciones de los propios funcionarios de la EBY. Es otro hecho que revela el despilfarro creado por Duarte Frutos, que luego sale y denuncia el «caos financiero» en Yacyretá.

La República precisa justicia. Ya decía Richard Nephew, Coordinador de Anticorrupción Global, que en Paraguay debe haber rendición de cuentas. Hagamos eso realidad! Por de pronto, la ineficacia, el gasto indebido, la prebenda, el planillerismo, incremento de bienes personales, etc, son hechos que revelan corrupción, por lo que es justo exigir rendición de cuentas al llamado «Mariscal de la derrota».