La catedrática Cristine Folch, de la Universidad de Dave (EE.UU.) ofreció perspectivas para la estrategia de Paraguay en la revisión del Anexo C del Tratado de Itaipú. Destacó que una negociación exitosa debe centrarse en intereses en lugar de posiciones. Además, se debe comprender el valor de Itaipú para ambas partes. Paraguay históricamente buscó ingresos de Itaipú, mientras Brasil se enfocó en el desarrollo de sus industrias. Con una reunión entre los presidentes Santiago Peña y Lula Da Silva, en Brasilia, prevista para este 26 de octubre, se inicia el proceso de revisión acuerdo binacional.
Según Folch, una estrategia de negociación siempre tiene que basarse en tres puntos clave: a) centrarse en intereses, en lugar de posiciones, b) comprender lo que está en juego y c) evaluar las opciones de manera criteriosa.
Intereses en lugar de posiciones
Folch hizo una presentación en el marco de debates sobre Democracia y Derechos Humanos, auspiciados por CEPAG, Decidamos y Global Infancia y resaltó la importancia de comenzar las negociaciones considerando los intereses en lugar de las posiciones. En lugar de defender una cifra específica, como un precio por megavatio hora, según la experta hay que entender los intereses propios y de la contraparte. “Los intereses son más profundos y estables, lo que puede conducir a soluciones más creativas”, sostuvo.
Entendiendo lo que está en juego
La represa de Itaipú, con una capacidad instalada de 14.000 megavatios y 20 turbinas generando 700 megavatios cada una, es la mayor del mundo en términos de producción. Se comparte igualitariamente entre Paraguay y Brasil. Aunque podría satisfacer la demanda de Brasil y Paraguay, nuestro país tiene otras represas que cubren sus necesidades, por esta razón, una parte de la producción correspondiente a Paraguay no se utiliza. “Itaipú representa un recurso valioso de energía renovable y limpia para Paraguay”, sostuvo.
Intereses históricos
La catedrática recordó que Paraguay históricamente ha priorizado la renta (ingresos económicos) de Itaipú, mientras que Brasil ha enfocado su interés en la energía para sus industrias. Es crucial que Paraguay evalúe si esta estrategia que utilizó en todo este tiempo, ha sido exitosa en términos de calidad de vida para la población, remarcó.
Anexo C y tarifas
Folch explicó que el Anexo C es una fórmula que define cómo calcular el precio de la electricidad en Itaipú. Se basa en un principio de equilibrio, donde los ingresos deben igualar los gastos, lo que lo convierte en un proyecto sin fines de lucro. Para establecer la tarifa se calcula la deuda, pagos a los gobiernos, gastos operativos y costos sociales, divididos por la energía garantizada. En 2019, esto resultó en aproximadamente 44 dólares por megavatio hora.
Con la finalización del pago de la deuda de construcción, que se completó el pasado mes de febrero, se abre un debate sobre la tarifa. “Si los gastos disminuyen, la tarifa podría bajar. Esto tiene un impacto significativo en Paraguay, ya que la tarifa de Itaipú para Paraguay es más baja que la de Brasil”, remarcó.
La estrategia de negociación de Paraguay en el Anexo C de Itaipú es un tema crucial y complejo que involucra la búsqueda de un equilibrio entre intereses económicos y la satisfacción de las necesidades de energía. La comprensión de los intereses, la evaluación de lo que está en juego y la adaptación a las cambiantes circunstancias económicas son elementos esenciales en este proceso en constante evolución, aspecto que deberán ser tenido en cuenta en el marco de las negociaciones que se arrancan este 26 de octubre, con una reunión en Brasilia, entre los presidentes Santiago Peña e Inacio Lula da Silva.
