La democracia debe dar respuesta a la pobreza y a la inseguridad para evitar el retroceso

Hay enorme desafío en Latinoamérica de mejorar nuestras democracias, porque si este sistema se deteriora también sucede lo mismo con la imagen del Poder Judicial. El descreimiento al sistema democrático afecta también a los Poderes Judiciales; por eso, el desafío de los gobiernos es combatir la pobreza, los delitos complejos, el narcotráfico y la inseguridad, sostiene el constitucionalista argentino, Jorge Alejandro Amaya.

Según Amaya, hay retroceso en América Latina porque las democracias no dan respuestas a la gente en el tema socioeconómico y seguridad. El jurista fue uno de los panelistas en el III Encuentro Interinstitucional y de Egresados de la Universidad de Bolonia en Latinoamérica, realizado en el Palacio de Justicia de Asunción este fin de semana.

Narcotráfico, delitos complejos, corrupción debilitan las instituciones y, por eso, hay descreimiento progresivo de la gente al sistema en Latinoamérica. Esta situación afecta también a los Poderes Judiciales de los países. Los riesgos para los Poderes Judiciales pasan esencialmente por los temas de narcotráfico, la inseguridad y la afectación de la independencia judicial, insistió Amaya.

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«En términos generales, le doy la derecha a la Corte Interamericana de Derechos Humanos que está muy preocupada por la independencia del Poder Judicial de distintos países latinoamericanos», afirmó.

Según el panelista, en Centroamérica se vio más fuerte el problema, pero la crisis va creciendo en la región. «Tengamos en cuenta que ha habido lo que se denominan los derechos constitucionales autoritarios, en el cual se han prácticamente eliminado Tribunales Constitucionales, Cortes Supremas, en muchos países latinoamericanos, principalmente en Centroamérica. Esto ha despertado preocupación por garantizar el principio de independencia judicial ante el avance de sistemas políticos mayoritarios de concentración de poder», señaló.

LOS DESAFÍOS

«Los desafíos son cómo mejorar nuestras democracias, democracias más inclusivas, que den respuestas más eficientes y más rápidas a la pobreza, a la desigualdad, a todos los temas que hemos tratado; al combate contra la corrupción, al narcotráfico, a la independencia judicial. En la medida que podamos dar respuestas eficientes, este descreimiento, que muchos sectores de la sociedad tienen respecto a la democracia, podrá ser seguramente paliado de mejor manera», manifestó.

Según el constitucionalista, la imagen del Poder Judicial en toda Latinoamérica se ha deteriorado en los últimos años, producto de una de las consecuencias de la afectación y de alguna manera de un modelo democrático que parece descreído por parte de un sector de la sociedad. Factores importantes para elevar la imagen del Poder Judicial son garantizar la independencia de los jueces, no solo técnicamente bien preparados, sino también que comulguen con los criterios de austeridad y de ética», señaló.

El doctor, Jorge Alejandro Amaya es abogado graduado en le Universidad de Buenos Aires (UBA). Especializado en Derecho Público (UP); Máster en Derecho con orientación en Derecho Constitucional y Administrativo (UP); Doctor en Derecho (área Derecho Constitucional) (UBA) y Posdoctor (área Derecho Constitucional) (UBA). Miembro del Instituto de Derecho Constitucional y Ciencia Política de la Sociedad Científica Argentina. Miembro de la Comisión de Legislación de la Unión Industrial Argentina (UIA) y de la Unión Industrial de la Ciudad de Buenos Aires (UICBA). Mediador Certificado por el Ministerio de Justicia de la Nación; árbitro de la Fundación Belgrano y miembro argentino y árbitro del Centro Internacional de Administración y Comercio del Perú (CIAC).

OTROS PARTICIPANTES

Durante el III Encuentro Interinstitucional y de Egresados de la Universidad de Bolonia en Latinoamérica, que se realizó en Asunción este fin de semana, también intervinieron ministros de la Corte de Paraguay y otros juristas invitados.

El doctor Mariano Llorens, juez de la Cámara Nacional de Apelaciones Criminal y Correccional Federal de la ciudad de Buenos Aires, Argentina, realizó su ponencia sobre “El narcotráfico como manifestación del crimen organizado”. Mencionó sobre las consecuencias del crimen organizado, principalmente el narcotráfico y las personas que han sido víctimas de este hecho. “La lucha contra el crimen organizado es como una carrera donde el Estrado y la sociedad siempre van atrás; a pesar de los esfuerzos de la comunidad internacional, el narcotráfico se ha extendido y consolidado, y que además se ha convertido en fuente de financiamiento de otras actividades delictivas”, señaló.

El ministro, Luis María Benítez Riera, de la Corte Suprema de Justicia de Paraguay, desarrolló el tema: “Relevancia de cooperación internacional en la persecución de hechos punibles de criminalidad compleja”. Reflexionó que “la cooperación internacional o colaboración o asistencia legal mutua entre Estados es el compartir informaciones de inteligencia en la lucha contra los delitos trasnacionales”.

Acto seguido, el doctor Guillermo Díaz Martínez, juez federal de la República de Argentina y máster en Justicia Constitucional y DD.HH. de la Universidad de Bolonia, habló sobre “Democracia y juicios de lesa humanidad”. Definió la democracia como forma de gobierno con división de poderes y con un contenido ético vinculado al respeto a los DD.HH. y puntualizó que los juicios de lesa humanidad son un desafío para nuestras democracias.

Carlos Rívolo, fiscal federal y expresidente de la Asociación de Fiscales y Funcionarios de la Nación (AFFUN), especialista en Justicia Constitucional y DD.HH. de la Universidad de Bolonia, tuvo a su cargo el tema “Justicia, política y corrupción”. Habló sobre la implementación del sistema penal acusatorio y los instrumentos legales que lo acompañan y que determinan mayor responsabilidad a los fiscales y mayor poder constitucional a los jueces.