Un integrante del Clan Rotela fue condenado a 9 años de prisión. Se trata de Walter Ismael Ortiz Martínez que, según la Fiscalía, operaba en la zona de Lambaré.
La fiscal antidrogas, Julia Báez, en un juicio oral y público, logró la condena de 9 años de cárcel para el que fue hallado culpable de la comisión de los hechos punibles de tenencia y comercialización de drogas y violación de la ley de armas.
La jueza, Leticia Franchi, presidió el Tribunal de Sentencia que, luego de analizar las pruebas ofrecidas por el Ministerio Público, decidió condenar a Ortiz Martínez a 9 años de cárcel.
La Fiscalía informó que, según los antecedentes del caso, el 26 de noviembre de 2021, cerca de las 14:30 horas, los agentes antinarcóticos allanaron una vivienda ubicada en el barrio Puerto Pabla, ocasión en que el acusado estaba con su madre.
La dueña de casa autorizó el ingreso al inmueble y en la habitación de su hijo los intervinientes encontraron encima del aire acondicionado una bolsa de polietileno que contenía sustancias sólidas de color amarillento, distribuidas en dos piedras de tamaño grande.
La Fiscalía agrega que durante el procedimiento, los antidrogas igualmente hallaron en la casa una balanza de precisión, bolsitas para hielo enteras y cortadas, un plato de vidrio de color verdecito y un pedazo de cuter con restos de sustancias amarillentas.
Un integrante del Clan Rotela: Armas y drogas
También se incautó en la ocasión una pistola marca Canik, procedencia turca, un cargador y 6 cartuchos sin percutir. El análisis primario de campo arrojó que las piedras pesaban 355 gramos de cocaína en su modalidad de crack, informó el Ministerio Público.
El Clan Rotela es una organización criminal paraguaya que ganó notoriedad desde la década de 2010 por su influencia en el sistema penitenciario. Armando Rotela, es el líder de la organización, que montó un «oficina» llama «La Jungla» en la Penitenciaría de Tacumbú. Actualmente, también se encuentra en prisión.