El director paraguayo de la Entidad Binacional Yacyretá (EBY), Luis Benítez, calificó como un “día muy feliz” la jornada en que se formalizó un acuerdo que garantiza una tarifa estable para la energía vendida a Argentina, después de años de negociaciones y de profunda incertidumbre financiera.
El documento, firmado por el presidente de la República Argentina Javier Milei y publicado en el Boletín Oficial, faculta a la Secretaría de Coordinación de Energía y Minería del país vecino a sellar un acta junto al Ministerio de Economía argentino, la ANDE del Paraguay y la propia EBY.
Benítez explicó que el entendimiento fija una tarifa de 28 dólares por Mega Watt, que la entidad binacional recibirá, permitiendo, según sus palabras, una previsibilidad sin precedentes para ejecutar el presupuesto, pagar gradualmente a proveedores y reactivar la obra Añacuá.
Hasta ahora, la entidad recibía pagos dispares —a veces 15, 18 o 20 dólares—, lo cual impedía proyectar con certeza la planificación financiera anual.
Fin de la incertidumbre tarifaria
El acuerdo de una nueva tarifa de la EBY, surge tras dos años de dificultades económicas heredadas, y varios meses de negociaciones con la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (CAMMESA), la ANDE y la Secretaría de Energía argentina.
“Era imposible tener una estimación cierta”, afirmó Benítez, quien destacó el acompañamiento del presidente de la República Santiago Peña, el Ministerio de Economía, la Cancillería y el equipo técnico de la margen izquierda de la EBY.
A su juicio, este paso representa no solo una victoria técnica, sino también política y diplomática. Mencionó que “la República del Paraguay históricamente ha retirado solo un 9% de la energía generada por Yacyretá, mientras que Argentina utilizaba entre el 80 y 90%”. Esta diferencia fue compensada con pagos por sesión de energía, estipulados en el tratado binacional en 10 dólares por Mega Watt, una cifra que —aclaró— se ha venido respetando y se encuentra actualmente al día.
Añacuá y otras soluciones EBY con nueva tarifa
La nueva tarifa permitirá que la EBY tenga un solo presupuesto consolidado para ambas márgenes, donde se prevé el pago de la deuda bancaria que en diciembre era de 92 millones de dólares y ahora se redujo a 78 millones, según el propio Benítez.
Añadió que el objetivo es saldar completamente esta deuda en tres años. De manera paralela, también se prevé la reactivación de la obra de Añacuá, paralizada desde hace un año por falta de financiamiento, y que generará mil puestos de trabajo, distribuidos equitativamente entre las márgenes paraguaya y argentina.
En cuanto a la generación de energía y su cesión, el director explicó que hay dos mecanismos claramente diferenciados. La cesión, regulada por el tratado, se paga a razón de 10 dólares por Mega Watt y corresponde al 50% de lo que Paraguay genera. Argentina utiliza lo restante y ahora pagará 28 dólares por Mega Watt según el nuevo acuerdo operativo, que no altera el tratado, pero organiza la gestión administrativa.
Compromiso político y técnico para cerrar el acuerdo
Para que el convenio tenga plena vigencia, aún se aguarda la firma del presidente de CAMMESA, de la Secretaría de Energía y de las autoridades de la propia EBY.
La Secretaría de Energía argentina tiene 15 días para emitir la resolución que oficialice la nueva tarifa, tras lo cual se podrá aplicar completamente.
El entendimiento se logró pese a las críticas condiciones económicas que enfrentó el nuevo gobierno argentino, según destacó Benítez, quien elogió la disposición al diálogo de ambas partes.
Nombramiento en la EBY y atribución del Ejecutivo
Consultado sobre la reciente remoción del ingeniero Ángel María Recalde como director paraguayo de la EBY y la designación de Miguel Olmedo en su reemplazo, Benítez se limitó a señalar que los cargos directivos y del Consejo en la entidad binacional son de competencia exclusiva del Poder Ejecutivo.
En ese sentido, consideró que no correspondía opinar sobre decisiones que son atribución directa del presidente en ejercicio.