Cuando el mundo se reúne para imaginar el futuro, no basta con estar presente: hay que destacarse. La Expo Universal de Osaka 2025 no es una feria más en el calendario internacional; es el punto de convergencia donde 158 países y regiones, junto a organizaciones globales, empresarios, líderes y ciudadanos de todas partes, dialogan sobre el mañana.
Bajo el lema “Diseñando la sociedad del futuro para nuestras vidas”, la cita japonesa promete ser un laboratorio planetario de ideas, tecnología y cooperación. En este escenario, Paraguay tiene una oportunidad irrepetible de mostrarse al mundo con identidad, visión y ambición. La participación de Paraguay en esta exposición universal debe entenderse como un acto estratégico de diplomacia pública, comercial y cultural.
El pabellón nacional —bajo el lema “Ikigai Paraguay: Energía que conecta”— transmite un mensaje de valor: somos un país con energía limpia, diversidad natural, riqueza cultural y una juventud innovadora capaz de pensar en clave global.
Con más de 28 millones de visitantes esperados en seis meses, esta Expo se convierte en una vitrina de alcance sin precedentes. Es el espacio ideal para proyectar nuestras fortalezas, como nuestros productos emblemáticos, la cultura viva, pero también la agroindustria sostenible, las energías renovables, la transformación digital y el potencial forestal. En un mundo en transformación estos activos, adquieren mayor valor. Si queremos atraer inversiones, ampliar mercados y fomentar el turismo, una exposición de estas características es el mejor lugar para posicionarse en el escenario global.
La visita anunciada por el presidente Santiago Peña, acompañado de una comitiva empresarial, refuerza la importancia que el país otorga a esta plataforma. El interés del Gobierno en ampliar la agenda económica con Japón y profundizar los vínculos bilaterales cobra un nuevo impulso en este contexto, en un momento en que está por cumplirse 90 años de relaciones diplomáticas ininterrumpidas con una nación que valora profundamente la confianza, la calidad y la estabilidad: virtudes que el Paraguay, en estos momentos está en condiciones de ofrecer.
En un mundo ávido de soluciones sustentables, el compromiso paraguayo con la energía limpia de Itaipú y Yacyretá, así como con el manejo responsable del medioambiente, puede convertirse en una propuesta atractiva y creíble para socios internacionales.
La Expo Osaka 2025 además de ser una vitrina para vender productos; es el espejo donde cada país se refleja ante los ojos del planeta. Y en ese espejo, Paraguay debe mostrarse como un país moderno, con raíces sólidas y visión de futuro.