Se vienen unos sufragios vacíos y huecos en proyectos de Gobierno




Muy escasa, por no decir nada, de propuesta de política de Estado se escucha de los diferentes candidatos a presidente de la República. Sus actos proselitistas son puras arengas y voces de agresión hacia algún oponente.

Esos planes de Gobierno tampoco se hallan en los medios de prensa. Así las cosas, el 30 de abril próximo, Paraguay vivirá unos comicios nacionales sin que haya claridad de cómo y de qué forma se beneficiará al pueblo desde el Palacio de los López.

El desarrollo de la Nación no será posible sin la ejecución de ideas de gestión que nazcan del poder. La autoridad que confiere el voto popular exige al ganador de las elecciones elevar el nivel de vida de las familias que viven en el territorio nacional. Lastimosamente, al menos hasta el presente, ninguno de los candidatos fue contundente y sólido en sus planes de Gobierno a favor de la gente.

El despegue económico únicamente será posible a partir de tomas de decisiones certeras y válidas. Ellas deben tener en cuenta una serie de escenarios económicos, sociales e incluso políticos. Sin embargo, hasta en las entrevistas de prensa y en los análisis de parte de los entendidos en política solo se destacan esa intención de llevar el contenido de «unos contra otro» o, en todo caso, una cierta propaganda hacia algún candidato.

Poco o nada se escuchó en la boca de los presidenciables hablar, por ejemplo, del aumento del Producto Interno Bruto per cápita, del desarrollo de la capacidad productiva, de la salud y educación de calidad, las necesidades básicas cubiertas, entre otros temas.

A nivel de política exterior solo hay balbuceos y nada, absolutamente nada, de cómo llevar austeridad y eficiencia en la función pública.

El partido hoy en el Gobierno y toda la tanda de la oposición no se esmeraron demasiado en instalar ante la opinión pública, si es que las tienen, sus políticas de Estado para el quinquenio 2023/2028.

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Aunque ya falta poco para el 30 de abril, día de los sufragios, se espera que algún borrador aparezca para disimular que las elecciones nacionales no son simple rutina, como las que viene arrastrando la República desde hace un buen tiempo.