Uno de los puntos atractivos para los miles de turistas que hoy visitan el país es la alta modernidad y tecnología de los shopping y centros comerciales. Esta verdadera industria se suma a la conjunción de abundantes áreas verdes y al despliegue de gigantescas obras de cemento que configuran el paisaje capitalino.
Nos detenemos en Asunción, que concentra a quienes participan y han llegado para los Juegos Juveniles Panamericanos. El rumor, el comentario y la conversación de los extranjeros en las calles revelan su admiración por el crecimiento de la ciudad, aunque tal vez no se dimensione plenamente debido al intenso tráfico cotidiano.
En los diferentes puntos comerciales, además, se encuentran las marcas internacionales más buscadas. Estas reconocidas firmas han apostado por instalarse gracias a las condiciones macroeconómicas y a la estabilidad de la moneda, factores que otorgan una gran previsibilidad para invertir, vender y comprar.
No es poca cosa la previsibilidad en términos económicos, pues facilita la planificación tanto para los turistas de paso como, especialmente, para los operadores e inversores. La falta de salida al mar ya no representa un obstáculo insalvable: los sobrecostos logísticos terminan compensándose con el tiempo gracias al ahorro que genera, precisamente, la seguridad de reglas de juego estables.
Estos centros comerciales, distribuidos no solo en Asunción, sino en todo el país, fomentan la competencia e incluso abaratan costos. Las grandes marcas extranjeras ingresan al territorio guaraní porque existe mercado; en otras palabras, porque la gente compra.
Otra característica destacable es la amplia red de franquicias, un aspecto innovador que impulsa el crecimiento. Asunción, por citar la capital, no es simplemente un espacio para compras: se ha convertido en un centro urbano de relevancia.
Los desarrolladores privados, respaldados por un entorno público favorable, están creando espacios multifuncionales. Por ello, abundan los espectáculos, así como construcciones de departamentos, viviendas, oficinas, gimnasios, universidades, hoteles, casinos, supermercados, salones de eventos y más.
Los Juegos Juveniles Panamericanos constituyen una ocasión que despierta la admiración de los turistas, y estas reacciones, a su vez, deberían permitir a los connacionales reconocer el crecimiento de una pequeña nación con un gran corazón que late con energía positiva en plena América del Sur.