Un complejo operativo de las varias fuerzas, desmanteló un centro de drogas en Colonia Estrella, situada al norte del distrito de Pedro Juan Caballero.
El sitio fue epicentro de un amplio despliegue antidrogas que permitió la desarticulación de una estructura clandestina de procesamiento de marihuana.
La intervención se desarrolló en un inmueble rural que funcionaba como centro logístico de acopio, acondicionamiento y distribución de marihuana, presumiblemente destinado al abastecimiento de redes criminales dedicadas al tráfico internacional de estupefacientes.
Desmantelamiento de centro de drogas es un golpe duro al narcotráfico
Durante el procedimiento, coordinado por la agente fiscal Rossana Coronel, los intervinientes descubrieron varias instalaciones acondicionadas para operar como centro de industrialización de droga.
El lugar contaba con cinco carpas de secado que almacenaban 15.000 kilogramos de marihuana palizada seca, además de cinco campamentos improvisados, utilizados para labores de despalitado, picado y prensado del producto.
También fueron encontradas 150 bolsas de marihuana picada, equivalentes a 3.000 kilogramos ya listas para su probable comercialización.
Refuerzos de autoridades antinarcóticos
La comitiva estuvo compuesta por agentes especiales de la Secretaría Nacional Antidrogas (Senad) y efectivos del Comando de Defensa Interna (CODI), con el apoyo táctico de la Subárea de Pacificación N°8 (SAP 8).
Tras las verificaciones correspondientes, las autoridades incineraron toda la droga incautada en el lugar de los hechos, siguiendo el procedimiento establecido para estos casos.
En total, las autoridades lograron la destrucción de aproximadamente 18 toneladas de marihuana, según lo informado oficialmente por la Senad.
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Pérdidas para traficantes
La operación se enmarca en los esfuerzos del Estado para golpear las estructuras logísticas y de producción clandestina que operan en el norte del país, particularmente en zonas de difícil acceso ubicadas cerca de la frontera con el Brasil, donde estas organizaciones suelen instalar sus centros de acopio de drogas para realizar actividades ilícitas.
Según coincidieron los intervinientes, este nuevo golpe reafirma la estrategia de intervención directa en los puntos neurálgicos de producción, en una franja territorial donde el cultivo de cannabis sigue representando una fuente de financiamiento para estructuras ilícitas transnacionales.
Las autoridades mantienen el enfoque de desarticular estos núcleos operativos, cuya capacidad logística representa una amenaza persistente para la seguridad fronteriza y regional.
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